Nos emociona anunciar la incorporación de cinco títulos fundamentales del director sueco a nuestro catálogo. Un recorrido por casi dos décadas de cine donde ya se adivinaba, o se confirmaba, la voz única y compleja de Ingmar Bergman.

Iniciamos este recorrido con su ópera prima, CRISIS (1946) y lo cerramos con uno de sus mazazos emocionales, LOS COMULGANTES (1963). Entre medias, tres títulos que reflejan su evolución como cineasta y una mirada cada vez más madura: PRISIÓN (1949), LA ALEGRÍA (1950) y JUEGOS DE VERANO (1951).

Estas películas estarán disponibles muy pronto en salas de cine y salas alternativas de todo el país.

Una oportunidad para redescubrir (o descubrir por primera vez) la fuerza de un cine que sigue interpelándonos y acompañándonos.

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